La mente como sabemos emerge del cerebro, y es la que nos permite tener conciencia. El cerebro es un órgano compuesto por una masa de unos 1400 gramos, conformada por más de 100000 millones de neuronas interconectadas entre sí. Unas con aspecto de materia gris y otras con aspecto de materia blanca. Que es capaz de reflexionar sobre la naturaleza no sólo de su entorno sino también del Universo del que provienen.

Nuestra mente es mucho más poderosa de lo que podemos pensar, es la gestora del funcionamiento de todos nuestros mecanismos internos, es decir, del funcionamiento de nuestros órganos, incluso de lo más automáticos e instintivos. Realmente es por ello por lo que nos preguntamos si es capaz de ir más allá de las funciones por las que comúnmente la conocemos.
Y es la que la mente tiene mucho que ver con nuestra realidad de lo que pensamos, hasta tal punto, que influye en cada decisión que tomamos o en cualquier acción que percibamos. Sin que seamos del todo conscientes de ello.

Cada uno es responsable de lo que ocurre en su medio. Se emplea con buenas intenciones cuando emitimos pensamientos positivos a nosotros mismos y a los demás. Y con malas intenciones cuando emitimos pensamientos de baja vibración, aquellos que tienden a desear el mal a los demás o aquellos que se basan en el resentimiento, en el egoísmo, en el rencor, etc. Tengamos en cuenta que podemos usarla para bien o para mal, para construir o destruir.

La manifestación de realidad soñada dejará de ser cuestión de un cuento de hadas, hoy en día ha logrado hacerse cada vez más evidente, y más ajustada a la realidad siempre que se entiendan los mecanismos Es importante aliarse con la mente inconsciente. En la que se guardan recuerdos, memorias y experiencias. Allá donde guardamos nuestras vivencias y poder rescatarlo para utilizar solo aquello que aún nos puede estar sirviendo. que operan en la propia vida.

Así, por ejemplo, Thomas Alva Edison, que desde 1847-1931 fue un destacado inventor estadounidense, después de lograr unos de sus inventos más destacados tras muchas pruebas afirmó:  “No he fracasado, he conocido 999 formas de cómo no hacer una bombilla·. Una forma de ilustrarnos como una situación aparentemente negativa, si le otorgamos un sentido positivo, podemos sacarle lo bueno de ello.

Otro ejemplo fue, que, siendo niño, llego del cole a la casa y le entregó a su madre una carta. Mi profesor me ha dado esta carta para ti, ¿qué pone allí?

Su madre la cogió y antes de leerla, se le humedecieron los ojos y leyó: Señora, su hijo es un genio. En este colegio es demasiado pequeño para él y no contamos con profesores suficientemente preparados para darle una buena educación a su hijo. Por favor, encárguese usted de darle una educación a su hijo.

Y eso hizo, se encargó incansablemente a la educación de su hijo hasta que enfermó y falleció. Mucho más tarde, Thomas se convirtió, en uno de los inventores más brillantes de su época.
La sorpresa se la llevó Edison, cuando investigando papeles antiguos, vio lo que realmente ponía en aquella carta. Señora, su hijo es deficiente mental, y no podemos aceptarlo en nuestro colegio. Encárguese de educarlo usted misma.

Y esta es la clave, si somos capaces de pensar positivamente, con tal intensidad y creernos capaces de que somos lo que soñamos, es realmente cuando entra en juego esa capacidad de hacerse realidad