Artista donde las haya porque el artista primero nace y luego se hace una composición de lugar que le haga crecer con la pasión, la formación y el querer suficiente. Así es la pintora linense Maral Ríos. Laura del Mar llegó oliendo a salitre y se impregnó de su cadencia, su querencia y la necesidad de transmitirlo.
Fuerte, apasionada, directa y dispuesta. Tanto que ha llegado a encandilar con su sabor, amor e interpretación al gaditano estrella Michelín, Ángel León para que su Aponiente luzca una obra de la artista campogibraltareña. «El es mar, yo soy mar y en las redes nos hemos conocido, se interesó por mi trabajo y ahora tenemos previsto una exposición en sus salas. Un lujo», afirma Ríos.