Dieciséis días,   dieciséis días es el transcurso de la Navidad, una fecha especial para muchos y para  otros no tanto…

Noche Vieja, Noche Buena y el día de Reyes, tres momentos mágicos y llenos de costumbres que llevamos viviendo desde niños. Pasan los años, la ilusión…. y las ganas de celebrar ésta fiesta cambian con la edad, pero nadie puede negar que es una época que nos hace sonreír, a pesar de anhelar recuerdos del pasado, o de no estar con los de siempre, aquellos que por alguna u otra razón viajaron a un mundo no muy lejano.

Cenas familiares, reuniones de amigos, cantes, bailes y unas copas de anís o de algún otro buen vino para recordar los buenos momentos juntos riendo y hasta llorando…

Siempre es un buen momento, aún sin haber visto a esos primos o tíos que sólo vemos una vez al año… ¿y por qué no? Al menos es un buen motivo para ponernos al día, dejar malos rollos y despejarnos de nuestra vida rutinaria incluso de la que a veces nos puede resultar algo monótonas.

Tan sólo dieciséis días de trescientos sesenta y dos, son un bonito regalo para estar divirtiéndonos juntos y desconectado de todo.

 Para muchos son unas fechas de las que les resultan algo hipócritas…. Tan solo recomendar… que hagan un balance de lo que ha sido el año entero… y que sientan con deseo la llegada del 1 de Enero, ese día todo pensamos “este año va a ser mi año”. Según  pasan los días, las semanas, los meses….tenemos momentos inolvidables, momentos detestables, momentos de cariños, momentos de deseos, momentos de dolor, momentos de odio, momentos de amor…..pero lo más importante, la experiencia de un nuevo año repleto de infinitas experiencias, de experiencias que te hacen ser diferentes y especiales.

Y si hablamos de ese 6 de Enero, día de los Reyes Magos, la ilusión en la mirada de cada niño, joven, adulto y anciano….

En una parte de nuestro ser nos atrapa el amor,. Ese niño pequeño de este bonito cuento en el que todos somos protagonistas.

Amor, mucho mucho Amor… e infinita Salud para este 2018 amigos.

TAMARA RUESCA